Archivo | agosto, 2011

Escribir sobre lo cotidiano

29 Ago

Escribir sobre lo cotidiano debería ser muy fácil. No hay nada que uno conozca mejor que su propia realidad, además mucho de los eventos diarios son compartidos por otros, así que no hay necesidad de muchas explicaciones porque los códigos compartidos sirven de enlace perfecto. Quizás es por eso que a mi me resulta tan difícil escribir sobre ello. Esos códigos se vuelven mis eslabones perdidos, haciendo que siempre haya algo extraño en la narración. También he llegado a pensar que esa dificultad se debe en mi aburrimiento por lo cotidiano.

Sin importar si tu eres de los que como yo tienes dificultades para narrar la compra del supermercado o de los que haces de ello una experiencia inolvidable no esta de más trabajar un poco esta habilidad tan necesaria.

¿Que es un hecho cotidiano?

Antes de comenzar a escribir sobre un evento que consideres habitual, es necesario saber qué es para ti un hecho corriente o habitual. Para ello haz una lista de eventos. Que no tenga menos de unos veinte elementos. Esto ayudará a focalizarte. Además escribe en otra hoja de papel como te hace sentir cada tema o haz notas en cada punto. Sientes que nadie va a querer leer sobre la señora que siempre va a comprar al súper a la misma hora de la mañana o si piensas que haría un estupendo personaje secundario en una novela de terror.

Actividades:

1. Lista de actividades cotidianas: de no menos de 20 elementos.

2. Notas sobre las reacciones a cada uno de ellos.

«Dios no es de fiar» Cain de José Saramago

28 Ago

«Dios no es de fiar. ¿Qué diablos de Dios es éste que, para enaltecer a Abel, desprecia a Caín?» Saramago

Podríamos decir que el tema central de Caín es la Biblia, más específicamente el antiguo testamento y sus contradicciones. Saramago nos deja claro desde el principio de la novela que no busca ser un reflejo de un contexto histórico o religioso, que por el contrario es ficción.

Usa el recurso de la ficción para mostrarnos a un Dios caprichoso, superficial pero sobre todo vanidoso. Ahonda en la incoherencia de muchos pasajes del antiguo testamento donde las normas no aplican de la misma forma a Dios que a los mortales, colocándose a si mismo por arriba de las reglas que él mismo ha creado. Es fascinante la forma magistral como Saramago desarma muchos parajes bíblicos y sus interpretaciones más recurrentes, y nos los muestra como lo que es: un absurdo.

Pero además podemos encontrar una critica al excepcionalismo que es una tesis que plantea que un grupo humano, por poseer una característica excepcional, queda excepto o fuera de las normas sociales, éticas o morales que aplican a los demás grupos.

Caín nos ridiculiza esa tesis, nos muestra con desparpajo y gracia lo contradictoria que es; y con aplomo nos asoma a una de sus más profundas consecuencias, la rabia, la impotencia y el enojo de aquellos condenados por «ese grupo excepcional». He de admitir que es fácil asociar el excepcionalismo con un país en particular y con sus constantes contradicciones pero también podemos encontrar como nosotros mismos justificamos y validamos sus acciones basados en este principio.

En resumen, Caín es un libro magnifico que nos abre las puertas a una nueva perspectiva de la Biblia o la política mundial, según se mire.

Paternidad de Conveniencia de Maureen Child

5 Ago

 

Bargaining for King’s baby (2008)
Ningún otro negocio le proporcionaría tanto placer. Con tan sólo unas hectáreas de terreno más, el millonario Adam King conseguiría por fin que el rancho familiar recuperara su extensión original. Tal era su obsesión que incluso se planteó casarse con la vecina de al lado, porque el padre de Gina Torino pretendía “venderle” a su hija a cambio de entregarle el ansiado terreno. Gina estaba al tanto de la manipulación de su padre y decidió negociar con Adam ella misma. Se casaría con el gélido ranchero, él recibiría su tierra… y ella tendría un bebé de King.

No sé como este libro llegó a mis manos pero supongo que suprimí la traumática experiencia. Me costó mucha fuerza de voluntad llegar hasta las ultimas páginas porque ni la prosa, ni los personajes o la historia pudieron atraparme.

La trama de la novela es un despropósito de principio a fin. El eje central de la historia es el matrimonio forzado entre los protagonistas (cosa común entre las novelas románticas) pero las razones por las que ambos acceden a este no tienen ninguna congruencia y muchísimo menos se adaptan a los tiempos en que vivimos. Es evidente que si el tema central de la historia es forzado todo lo que se construye a partir de allí no puede más que tambalearse.

Los personajes por otro lado son a dos dimensiones, están llenos de tópicos rancios, como el clásico del chico “rico y bien parecido” que sufre de la enfermedad de la «inmadurez emocional» que se curará por arte de magia, al enamorarse de la protagonista.

Pero si esto era malo, el personaje principal de la heroína, Gina Torino, es peor. Esta enamorada de un tipo pero en vez de usar técnicas de una mujer adulta para hacer que este se fije en ella, decide forzarlo a tener un hijo con ella y a contraer matrimonio y él accede, todo por un terreno. Supongo que es una convicción personal, pero me irrita que se use a los hijos con fines turbios aunque sea en una novela de rosa.

En definitiva, no encontré nada que valiera la pena en este libro.